Cómo ganarte la confianza de tu nuevo equipo: 7 pasos hacia el éxito
¿Te incorporas a un equipo con tecnología del pleistoceno y procesos que hacen aguas? Así puedes ganarte su respeto e impulsar cambios de verdad, sin convertirte en el típico sabelotodo insoportable.
Gracias, generación Z, por haber cambiado el mercado laboral. Ahora ya no son solo los empleadores quienes eligen el talento, vosotros también elegís al empleador. Si queréis desarrollaros y construir una carrera, este post es para vosotros.
Usadlo para orientaros en un nuevo entorno o simplemente para salir de un atasco. No hace falta seguir cada punto al pie de la letra — tomadlo como un conjunto de ideas que os ayudará cuando tengáis la página en blanco.
Comparto mi experiencia. Si acabáis de uniros a un equipo y habéis notado que la calidad del producto cojea y las tecnologías están anticuadas, es normal que queráis cambiar las cosas. Pero ¿qué hacéis si todavía no tenéis autoridad?
1. Entender el enfoque actual
Primero, estudiad a fondo cómo está organizado el trabajo y por qué se utilizan precisamente esas tecnologías. En lugar de preguntar «¿por qué no usamos algo más moderno?», preguntaos «¿por qué usamos esto ahora?». Esto mostrará respeto por el contexto y os ayudará a ganaros la confianza.
2. Sacad conclusiones y elegid un rumbo
Cuando entendáis los procesos, probablemente veáis una de estas dos cosas:
- Veis razones justificadas para las herramientas antiguas. Encajan con la empresa y resuelven sus problemas. Decidid si os vale o preferís buscar un equipo con enfoques más actuales.
- No veis razones de peso para mantener el statu quo, y la modernización realmente ayudaría. Entonces elegid: quedaros e ir introduciendo mejoras poco a poco, o pasaros a un equipo que ya esté en ese nivel.
3. Tened cuidado al expresar descontento
Mientras observáis y aprendéis, procurad no ganar fama de «el que lo sabe todo y todo lo critica». Vuestro objetivo es encajar en el equipo, ganaros la confianza y ayudar, no mosquear a los compañeros con críticas constantes.
4. Primero, subid el listón en vuestro propio trabajo
Donde podáis, demostrad altos estándares en vuestras tareas. A medida que crezca la confianza, vuestros resultados se convertirán en vuestro mejor argumento. La gente verá los logros y tendréis la autoridad para extender las prácticas exitosas al resto del equipo.
5. Introducid cambios de forma gradual
Otro buen enfoque es mezclar con cuidado lo viejo con lo nuevo. Añadid una herramienta pequeña pero útil o una funcionalidad al sistema existente y mostrad cómo mejora la claridad, la velocidad o la calidad. Si funciona, asimilar lo nuevo será más fácil.
6. Ganaos autoridad a través de resultados consistentes
La autoridad llega cumpliendo de forma fiable, en plazo y sin dramas. A medida que profundizáis en la experiencia, vuestros argumentos para nuevas ideas son más claros, porque conocéis el sistema y la gente confía en vosotros.
7. Construid una reputación de persona que hace las cosas
Un historial de resultados exitosos es el camino más corto hacia la influencia. Los compañeros y los jefes valoran a quienes son de fiar. Las ideas de estas personas reciben la atención que merecen, porque unen las palabras con los hechos y están dispuestas a asumir la responsabilidad de llevarlas a cabo.
Siguiendo estos pasos, reforzaréis vuestra posición, aportaréis una perspectiva fresca y ayudaréis al equipo a subir de nivel — incluso sin tener antigüedad desde el primer día.
Y sí, esto también queda muy bien en vuestro currículum.